domingo, 23 de junio de 2013

Poema de una amiga taciturna.

                                                                              El influjo de  la luna.

Andrés, te recordé junto a la Del Rey
junto a olas de mar no saladas
ante arena finísima de la península
con elevaciones casi inexistentes
te recordé más marzo que abril
con mi bufanda atada al pecho
multicolor
radiante
con los perritos
tan parecidos a nosotros
lamiéndonos los pasos
y el perol de agua
volando
Ay, Andrés, quiero que te duela la vida otra vez
y no me culpes, no me culpes.
don't let me down, don't let me down
sólo quiero que te duela
y escribas
escribas como loco en el mar
como loco en hamacas amaneciendo
con musica deboradora de fondo
con canciones pop cuando no haya luz
cuando corpoelec decida apagar al alma
la fictisia, la que unta panes con veganesa
Ay , Andrés
recuerdo abril y nos creo libres
¿lo estás, andrés, fauno del mar?
¿lo estás amigo del silencio?
amigo, siempre amigo
de espalda pecosa y sueños distantes
de dolores de esperma y camisa bacteriana
Ay amigo,
no poeta
poco poeta
más luz
más amigo y luz
más minotauro menos bar
más imagen menos palabra.
Ay, andrés.
extraño tu cabello revuelto entre la arena
sentirme como una fuckin loca
que nos roben los zapatos y las rocas
extraño sentirle
entre la roca de medianoche y el pez muerto
entre mis "quiero a un diego" y tu "sé paciente"
Ay tremont, tremon, tremor, temor..
tanto daño y tanta sal
tantas rocas al mediodía
quemándonos el lomo
queriéndo ser más que tierra
más que invento del alado
el de al lado,
Andrés, busquemos el hielo
y posémoslo en tus brazos
a ver si nos alivianos un poco
y recordamos las medidas en hamaca
don't let me alone, don't say good bye.
Andrés, regálame el libro de la luna
el que dice cómo me veo
el que aclara por que soy
andrés bebamos y rodemos
y por favor
por favor, andrés,
don't turn aroune.
im just ride.
we just
we just
ride,
andrés
just ride!