El viajero del tiempo.

Hola, ¿Cómo te va?, ¿Estas ahí?
¿Puedes oír estos versos de un joven que no sabe bien su trayecto?
Te extraño, y no sabes cuanto... Te celo y no tengo motivos.
Pienso y pienso, y aún no tengo la respuesta de cómo llegué a donde estoy.
Y tú, siquiera sin poder explicarte… A penas me logras mirar y con ojos de duda cuestionas mi hablar.

Poco a poco se me olvido tu rostro, tus cálidas pupilas, el brillo de tus pequeños ojos, poco a poco se me fue borrando tu imagen, tu sonrisa imborrable, tu nariz perfilada y diminuta, tu cuerpo tan desnutrido y flacuchento; ¡Eras tan bello y tan ingenuo!
Los ruidos pestilentes de la ciudad te ensordecieron, el humo y la suciedad de la calle te convirtieron, mutaste y dejaste de ser desigual, el niño tan diferente a los demás.
No sabía que podía extrañarte tanto, pero bueno… Dejemos de cuestionar y dime:

¿Qué has hecho?
¿Aún te gustan los cuentos?
¿Sigues comiendo las galletas de abuela a escondidas?
¿Cuántas heridas tienes en las rodillas?

Tengo demasiadas preguntas que hacerte, imagino que tu ignoras mi vida, este mundo es tan aburrido que ni si quiera lo miras, pienso que haces bien, a diferencia de ti, yo si quiero saber todo, saborear cada club social con malta, entretenerme con cualquier objeto que te llame la atención, exclamar un llanto cuando armes un berrinche, o mejor aún hacerte el enfermo para faltar al colegio y quedarte todo el día con abuelo.

¿Qué si estoy loco?, ¿Hasta tú me ves con ojos de locura?, Vaya que debo de estarlo, te tengo una propuesta, ¿Te unes a mi locura?
Bien, es un acuerdo.
¿Qué qué significa eso?
Cierto… Aún estas aprendiendo, bueno déjame decirte que yo con 20 años lo sigo haciendo, eso de crecer es un poco turbulento, es como una ola de mar que arrasa con tu castillo de arena sin avisarte, solo te deja un frío en el pecho, ¿Recuerdas?.. Sí, lo sé. Yo también odié a ese mar, recuerdo ese castillo de arena que tanto te costó armar.

Hmmm, me gusto esa sonrisa, en mi sí puedes confiar, pero cuidado… No lo hagas con nadie más, hay muchas personas malas en este mundo que sólo quieren verte mal, podemos continuar… ¿Aún tienes esa duda verdad?... Bueno, yo no soy quién para decirte que camino debes tomar, creo que con el tiempo te darás cuenta, que te gusta en verdad, a mi me va muy bien, he sonreído mucho al igual que tú, y he llorado también, hey hey.. No arrugues la cara, eso es bueno, he aprendido mucho de ello, sé que tú lo harás, se qué será lo correcto.

No dejes que nadie te diga que camino es el mejor, sólo tu sabrás cual es en tu interior.. y bueno dejando esa duda a un lado es mi turno de preguntar… ¿Aún tienes esos Albunes de Calcomanías que tanto coleccionabas?

Wao, tú si que eras consentido, hoy en día mis padres no me dan nada. No, no son malos, sencillamente la situación ha cambiado, tú lograras ser muy humilde, con un corazón bien grandote y completamente blando… ¿Qué cómo se todo eso?

Porque creo que es como si te miraras en el espejo, en unos años entenderás que te dijo este loco extraño que esta muy cuerdo, en unos años crecerás y quien sabe, cuando mires tu reflejo quedarás inmutado, quedarás en silencio. Sí se que nada estas entendiendo, pero no olvides esta conversación, te servirá mucho en el futuro, recuerda: ¡No digas Nada! Es nuestro secreto, yo solo soy tu amigo imaginario, solo soy un viajero en el tiempo shhh, me despido con gran abrazo pequeño y un sutil beso en la mejilla, sigue jugando, sigue creciendo, yo mientras te seguiré escribiendo.

Recuerda pequeño, yo te vi en mi corazón, y eso me hizo volver hacia a ti, siempre he dicho que las grandes cosas te atraen, y tú aunque pasen miles de años seguirás siendo una de ellas, cuando me quieras cerca sólo cierra los ojos, recuerda: “No divulgues el deseo”, si no, no se hace realidad, aprieta mucho tu pecho y mírame en tú corazón, porque allí siempre yo voy a estar.